
El actual sistema económico está desestabilizando la sociedad y el planeta. Es hora de cambiar. También es hora de la renta básica.
Porque que hablar de la experiencia religiosa cuando estamos sumergidos en el caso Rubiales, la inflación, la investidura, el cambio climático, la guerra en Ucrania, etc., etc.… Y cientos de temas que en nuestro día a día nos hacen bailar al son de los medios de comunicación….
Quizás porque inevitablemente “todos” estos interesantes temas de actualidad nos alejan inevitablemente de nuestra interioridad metiéndonos en un sainete donde tomar alguna postura lleva a estar en contra de otras posturas en una espiral sin fin.
Es decir, la fragmentación del tejido social es un hecho, aunque entiendo y me solidarizo cuando se alzan las voces para lograr una justicia social anhelada por todos. Esta fragmentación se acelera con los tiempos, así como se acelera la tecnología, la economía y el mapa geopolítico de nuestro planeta.
Entonces… como salir de semejante lío, como hemos escapado o pasado página en otros momentos de nuestra historia…
Quizás, la aparición de personajes “únicos”, gentes inspiradas que en nombre de lo más sagrado acercaron la esperanza y se desmarcaron de su “época” dando una señal, esta “señal” convertida en referencia de futuro, unió a poblaciones enteras y dio pautas para todos durante muchos y muchos años…
Luego se organizaron en iglesias, alcanzando un “poder terrenal” que dura hasta nuestro tiempo. No voy a cuestionar ahora su aporte histórico, simplemente digo que el tiempo siguió su ritmo, las poblaciones se conectaron y por fin la “tierra” se convirtió en nuestra casa común.
El caso es que nadie y digo nadie, puede estar indiferente a los vaivenes de la historia y todos somos agentes del bien o del mal que padecemos. Quizás llegó la hora de que se multipliquen los personajes “únicos e inspirados” y que emitan la señal adecuada para esta época.
El Ser Humano, a pesar de todo, ha crecido y se va adaptando a este nuevo mundo, aunque un poco caótico, seguimos siendo nosotros, nuestra historia y nuestro porvenir.
Estoy seguro que alguno sintonizará con estas escasas palabras y pensamientos, estoy seguro que en nuestro interior y en cada uno de nosotros anida esa verdadera espiritualidad que nos conecta con lo verdaderamente importante.
Quizás… en la tranquilidad de la noche, o en el silencio compartido de la naturaleza, o en una mirada renovada de la realidad que vives, conectes con tu interior por un instante… Atrapa ese instante porque en el está la llave de tu futuro y el de todos nosotros.
Y si quieres avanzar un paso más, pregúntate… que me llevó a escribir estas palabras, por que ahí, seguramente ahí, estaremos fuera de este lío y en una nueva realidad.
El actual sistema económico está desestabilizando la sociedad y el planeta. Es hora de cambiar. También es hora de la renta básica.
Hoy día está instalada una conciencia ecológica que ha crecido en los últimos años, comenzando por el activismo social noviolento, el esclarecimiento y la denuncia de las malas practicas, resaltando que de nuestras acciones de hoy depende nuestro futuro y el de las nuevas generaciones.
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